Aguas servidas por la anarquía

Por: JunquitoSite

Resulta incomodo observar como las aguas servidas ruedan libremente por la carretera de El Junquito, con mucha apatía de sus habitantes como de las autoridades Municipales de Libertador.

Crece la población y el gobierno colabora con la importación de damnificados que se suman a la gran masa demográfica en el sector, mientras cada casa, cada rancho drenan sus tuberías de cuatro pulgadas a las cunetas de la vialidad.

Subiendo la Yaguara podremos encontrar bienhechurías que se construyen a diario sin planificación urbana, donde los servicios públicos se improvisan y vienen colapsando la calidad de vida de los ciudadanos establecidos desde muchos años en la parroquia.

Si recorremos los distintos kilómetros de la carretera iniciándonos desde la Yaguara hasta El Pueblo, fácilmente podremos apreciar esos tubos plásticos apuntando sus aguas negras a las cunetas, pero si éstas en cambio se encuentran bloqueadas por escombros y basura, entonces toda la vía en su plenitud se convierte en un gran rio de desechos biológicos y excrementos.

La situación es crítica desde el kilómetros 4 hasta el kilómetro 12 porque estos poblados son contiguos a la carretera, combinan las aguas servidas y los contenedores rebosados de basura, posibilitando brotes de epidemias por la falta salubridad pública, que requiere de una política de canalización de desechos líquidos por parte de la Alcaldía Libertador.

La combinación de estos factores ocurre por la inconsciencia, comodidad y falta de educación de ese grupo de personas que se han acostumbrado a lanzar sus aguas negras a la vía pública, pero también debemos recordar que existe irresponsabilidad e indiferencia por parte de la Alcaldía Libertador y la Corporación de Servicios Metropolitanos al no ejecutar los correctivos necesarios en obras y servicios, además de una campaña educativa que oriente al habitante para asumir su rol de ciudadano.