Por: Carmela Longo/ Cadena Global
Ni hoy ni mañana ni nunca. Según informó una fuente muy confiable, el martes se produjo una reunión en la oficina del vicepresidente de Venevisión Joaquín Riviera a la que fue convocado el escritor.
En esa conversación, el ejecutivo le notificó al poeta que su programa Los imposibles, cuyo fallido estreno el domingo pasado generó estupor y todo tipo de preguntas, no irá al aire sino a algún archivo muerto.
No hubo mayores explicaciones. Sin embargo, se pudo conocer que la decisión es una consecuencia de la apretada de tuercas que Conatel le está aplicando al canal de La Colina.
En primer lugar, por las líneas sobre la inseguridad que el escritor incluyó en el capítulo final de la telenovela La vida entera.
En segundo lugar, porque la primera entrevista con José Luis Rodríguez incluía algunas preguntas de tinte político que, según los funcionarios del ente, resultaban inadecuadas.
La situación arreció a raíz de la transferencia de Conatel al despacho que dirige el ministro Diosdado Cabello.
Si bien desde hacía varios meses funcionaba una oficina de la entidad reguladora frente al estudio cuatro de VV (hecho comunicacional, público y notorio que no había trascendido), donde chequeaban los contenidos antes de que los programas salieron al aire en una clara práctica de autocensura, desde que se produjo la transferencia la situación se ha tornado más crítica todavía. Tanto así que ya comenzaron a producirse distintas decisiones relacionadas con la programación del canal de La Colina.
De ahora en adelante se apuntará a una oferta de corte familiar para evitar sanciones o procedimientos administrativos que pudieran tener consecuencias negativas para el canal.
Cero carne. Un escándalo se armó por la transmisión de un desnudo del actor Juan Carlos García en el segundo capítulo de la telenovela Los misterios del amor . Eso originó un tirón de orejas por parte de Conatel.
Este organismo también deter minó que las conductoras del magazine matutino Portada’s, es decir: Mariángel Ruiz y Carolina Indriago, no pueden usar escotes ni minifaldas ni shores para aparecer en pantalla. Lo que dicen ellas y su compañero Leonardo Villalobos, además, es supervisado desde la cabina por la productora general Edith Valerio, para enmendar la plana inmediatamente si los animadores dicen algo impropio o que podría acarrear una sanción.
Las chicas que "decoran" los programas humorísticos del canal tampoco podrán aparecer ligeras de ropa. El tema es tan fuerte que hasta el desfile en traje de baño de las candidatas al Miss Venezuela, en el concurso que se realizará a mediados de septiembre, debe ser transmitido después de una hora determinada para no causar la ira de los fiscalizadores.
Adiós. La presión concluyó con la salida de El Moreno Michael del staff de El precipicio. No podía continuar imitando a José Feliciano porque eso "era una burla para los discapacitados" ni a Juan Gabriel por sus amaneramientos.
CAMBIOS EJECUTIVOS
Pero los movimientos que en los últimos tiempos se han producido en los pasillos de Venevisión no tienen que ver exclusivamente con los estudios de grabación
En la alta gerencia también hay cambios muy significativos. De hecho, Carlos Bardasano no seguirá desempeñándose en la presidencia del canal de La Colina y su lugar será ocupado por Miguel D’Vorak, quien tiene una posición política bastante neutra que es la que pretende explotar la planta en los próximos meses.
En este sentido, la directriz que recibió D’Vorak de parte del tren ejecutivo de la Organización Cinseros es que debe mantenerse en el medio del conflicto político. Como segunda a bordo estará Adriana Cisneros.
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